En 1772, el astrónomo conocido como Titius, observó que la distancia entre el Sol y los planetas de nuestro sistema solar no parecía fortuita, sino que seguía una regla.
Seis años después, Bode, basándose en lo propuesto por Titius enunció la regla de Titius-Bode.
Esta regla más bien parece un truco. Siendo sencillo ayudó a encontrar asteroides o incluso planetas, aunque también tiene algún fallo.
Para comenzar, partimos del número 3 y formamos una sucesión de números tales que cada uno sea el doble del anterior “3, 6, 12, 24, 48, 96, 192, 384”. Con esta serie, añadimos el 0 en el comienzo, con lo cual nos queda “0, 3, 6, 12, 24, 48, 96, 192, 384”, Lo siguiente a hacer es sumarle 4 a cada cifra, quedándonos: “4, 7, 10, 16, 28, 52, 196, 388”. Dividimos la serie entre 10: “0,4 – 0,7 – 1 - 1,6 - 2,8 – 5,2 - 19,6 - 38,8” y ya tenemos la serie.
Estas cifras nos indican a cuántas Unidades Astronómicas –U.A.- (150.000.000 km) se encuentra dicho planeta del Sol.
Vamos a comprobar los datos:
Como podemos observar, la cifra 2.8 de la serie no corresponde a un planeta, sino al cinturón de asteroides situado entre Marte y Júpiter.
Además, esta ley no es válida para Neptuno, ya que no coincide la distancia según la ley con la distancia real.
No hay comentarios:
Publicar un comentario